Más de 450 niños y jóvenes reciben diariamente una merienda nutritiva luego de practicar deporte. En breve comenzarán las obras de refacción del merendero.
El Club Defensores de Santa Catalina de Capitán Bermúdez inició la entrega de meriendas nutritivas a más de 450 niños y jóvenes que participan en las diversas disciplinas de la institución. Esta iniciativa, que se enmarca en el proyecto «MerenDAR» del programa Sembrando Futuros, facilita a los clubes deportivos el acceso a alimentos de alto valor nutricional, promueve hábitos saludables y mejora la infraestructura de los merenderos.
“Estamos muy agradecidos de que nos hayan elegido”, dice Stella, voluntaria del club. Ella junto a Jorgelina, reciben diariamente a los sucesivos grupos de chicos y chicas que se acercan a participar del “tercer tiempo”, como ellas llaman, a ese espacio de encuentro luego de la práctica en donde todos comparten la merienda. Mientras comen frutas, cereales y toman alguna infusión, comentan jugadas de la práctica, sus travesuras, y se divierten en un espacio que poco a poco empiezan a apropiarse. “Gracias a este apoyo, vamos a poder agrandar el merendero para que los chicos estén más cómodos”, comentan casi al unísono, las voluntarias, quienes hace años le ponen el hombro y dedican mucho de su tiempo a sostener este espacio.
El programa Sembrando Futuros, de Global Communities Argentina y Fundación John Deere, se expandió a las localidades de Capitán Bermúdez y las Parejas. El mismo, apoya al club a través del proyecto “MerenDAR”, de una forma integral con el objetivo de fortalecer el espacio del merendero. Por un lado, facilita el acceso a alimentos saludables, buscando mejorar los hábitos y valores nutricionales de los niños y jóvenes que concurren al club. Por otro lado, contribuye a desarrollar la infraestructura adecuada para el sostenimiento del dispositivo, ya sea refaccionando el espacio destinado por la institución o aportando a la construcción de nuevas instalaciones para dichos fines. Además, invita a los voluntarios interesados en la propuesta a desarrollar habilidades y conocimientos en la gestión del merendero, como así también a capacitarse sobre prácticas alimenticias saludables vinculadas al deporte.
Recientemente, la comisión directiva, junto a voluntarios y socios del club, participaron del taller de metodología PACE de Global Communities, herramienta de gestión comunitaria participativa, que fomenta en los asistentes aptitudes y habilidades de liderazgo para llevar adelantes proyectos dentro del club de forma participativa y eficiente. Este instrumento ofrece un método para analizar y priorizar las necesidades de la institución, facilitando la creación de iniciativas y la movilización de recursos para abordar esas problemáticas. Además, el club de Capitán Bermúdez recibió la visita del nutricionista y médico deportólogo, Eugenio Gordon, quien brindó una charla sobre nutrición deportiva.
“Gracias a estas herramientas que nos brindaron, nos damos cuenta de que hay muchas cosas que estamos haciendo bien pero que no podíamos identificar claramente”, indica Carlos Pigliacampo, presidente del Club Defensores de Santa Catalina, y agrega: “Ahora sabemos qué significan y sabemos cuál es el rumbo a seguir». El club barrial cumple una función social muy importante en la zona, recibiendo a más de 700 chicos y chicas que practican futbol todos los días en sus instalaciones.
La seguridad alimentaria y el deporte son pilares fundamentales para el desarrollo integral de los jóvenes. Iniciativas como el proyecto “MerenDAR” no solo contribuye a que los deportistas del Club Defensores de Santa Catalina reciban una merienda nutritiva, sino que también fomentan hábitos saludables y un sentido de comunidad. A través del deporte, los participantes aprenden valores esenciales como el trabajo en equipo, los buenos hábitos y la perseverancia. Estas experiencias, combinadas con una alimentación saludable, no solo mejoran su rendimiento deportivo sino también su calidad de vida. En un contexto donde la seguridad alimentaria es crucial, proyectos como estos demuestran que invertir en la nutrición y el deporte es invertir en el futuro de nuestras comunidades.